Tú a Pamplona y yo a Chiclana



Blog de conexión trasatlántica para componentes de Rudy's Senior





lunes, 15 de agosto de 2011

COLORÍN COLORADO...

Bueno, chicos y chicas, las vacaciones tocan a su fin. Sentado en una cómoda hamaca, a la sombra de un ficus centenario, mientras contemplo cómo los niños se lo pasan en grande en la piscina de un complejo deportivo de alto standing sito en Benidorm, aquí me tenéis redactando la última entrada del blog lejos de Badalona. Dentro de unas pocas horas tocará subir de nuevo al coche y emprender el regreso a casa... Pero no será tan duro como en otras ocasiones, porque también tenemos ganas de veros, de quedar para recordar todo lo vivido, ver las fotos y, evidentemente, beber mojitos, tintos de verano y aguas de valencia...

Pero bueno, como estuvimos unos cuantos días sin cobertura y con un difícil acceso a Internet, aprovecho este ratito de relax para colgar unas pocas fotos que resumen nuestra experiencia de los últimos días. Allá van.

Después de dejar Villa del Río, en Córdoba, fuimos a un pintoresco pueblecito de montaña, Pontones, situado en la sierra de Jaén, en mitad del mayor Parque Natural de España, el de Cazorla y la Sierra del Segura. De hecho, en este pueblecito es dónde nace el río Segura, que riega toda la huerta murciana.

Llegamos en plenas fiestas. Y, sí amigos, aquí también celebran encierros. O sea, que este año no he podido ir a Pamplona, pero al menos he podido ver un encierro. Con sus toros y sus cabestros (o maestros, como dice el Jan). Aquí, la manada bajando hacia el pueblo, y nosotros viéndola tan ricamente desde la ventana de la casa.









Aquí, los niños a lomos de uno de los caballos que participaron en el encierro.













Rubén, arriesgando la vida junto con otros mozos que saltaron al ruedo. ¡Fueron momentos de gran tensión! Bibi, con toquilla, peineta y vestida de negro, no aparece en la foto porque estaba desmayada, atendida por los chicos de la cruz roja...









Superado el susto, las féminas decidieron hacer un poco de ejercicio. En Pontones, como no disponen de gimnasio, han colocado unas estupendas máquinas para hacer ejercicio a las afueras. Y allá que se fueron nuestras jabatas...










No, no es que la cercanía con el Magreb haya transformado a nuestros vástados en musulmanes.. ¡Es que pillaron piojos! Aquí, en pleno tratamiento, con la cabeza apestando a vinagre...








Después de Pontones nos quedaban dos opciones: regresar a casa y dar por finalizadas las vacaciones, o bien alargarlas un par de días. Evidentemente, nos decidimos por la segunda opción, y después de mucho buscar encontramos un hotelito en Benidorm que no está nada mal. Desde aquí os escribo estas líneas.



Después de cenar fuimos a dar un paseo y topamos con... ¡la mismísima Maria Jesús y su acordeón! David y Maria Jesús, os dedicamos los Pajaritos y esta foto: va por ustedes!














Por la mañana, recién levantados, nos fuimos a la playa. Como podéis comprobar, Benidorm goza de una magnífica playa virgen, a la cual no han llegado los excesos de la civilización y de la explotación turísticas e inmobiliaria. De hecho, estábamos prácticamente solos, sin problemas para plantar la sombrilla. Un auténtico espectáculo...






Y tras una sesión de natación en la playa y en la piscina, nada mejor que un partidito de tenis en las inmejorables instalaciones deportivas del hotel. Evidentemente, ganamos los chicos, y por paliza... Aunque hemos de confesar que las chicas tienen un revés que ni Federer...







Y esto ha sido todo. El resto de fotos ya las veréis cuando volvamos a Badalona, que será dentro de nada. ¡Un abrazo muy fuerte para todos!






1 comentario:

  1. Ya veo lo bien que lo habéis pasado, menuda ultima semana, toros, buena música y grandes torneos de tenis.
    Bueno espero que contéis donde han metido la cabeza Iker y Pau,jajajaja.
    Bueno cuando terminéis de hacer la compra, lavar toda la ropa, hacer la plancha y ordenar un poquito el piso y terrazas nos avisáis.
    Un saludooooo

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